domingo, 24 de agosto de 2025

Chùa Diên Hựu



El conjunto de Chùa Diên Hựu, más conocido por albergar la célebre Pagoda de un Solo Pilar, sorprende por su doble carácter: la sobriedad icónica de su pabellón sobre el agua y la abundancia ornamental de los altares en el interior del templo principal. El nombre significa “Felicidad duradera”, y se remonta al siglo XI, cuando el emperador Lý Thái Tông soñó con la diosa de la compasión entregándole un hijo sobre una flor de loto. 

Al recorrer el recinto, el contraste se hace evidente. Afuera, la imagen minimalista de la pagoda aislada en el agua; adentro, un despliegue barroco de devoción. Los altares del templo Diên Hựu aparecen rebosantes de figuras doradas, hileras de pequeños Budas en actitud meditativa, imágenes de Quan Âm con múltiples brazos extendidos, flores frescas, frutas y objetos cotidianos convertidos en ofrendas. El resplandor del pan de oro y de las lacas rojas se mezcla con el aroma del incienso y con el murmullo de los fieles que encienden varillas, se inclinan y depositan sus plegarias entre tanto símbolo.

El conjunto nos habla de continuidad: la pureza soñada en la flor de loto que inspiró al emperador convive con la religiosidad popular, colorida y tangible, que hoy se expresa en botellas de agua, paquetes de incienso y hasta productos de consumo ofrecidos junto a las estatuas.