Toshogu Shrine (東照宮, Tōshōgū) es el lugar donde descansan los restos de Tokugawa Ieyasu, fundador del shogunato de Tokugawa, que gobernara Japón por más de 250 años, hasta 1868.
En Toshogu, Ieyasu aparece venerado como la deidad Tosho Daigongen, "Gran Deidad de la Luz Brillante del Este".
Linternas, a la entrada.
El conjunto del Santuario está formado por más de una docena de edificios distribuidos en una boscosa montaña evocadora, a la que la niebla y la llovizna del día de nuestra visita dotaban de una atmósfera absolutamente mágica.
En la visita, lo primero que encontramos son un grupo de almacenes ostentosamente decorados. De hecho, todos los edificios del conjunto aparecen decorados con incontables tallas de madera recubiertas con pan de oro hasta un extremo de preciosismo como no habíamos podido contemplar en ningún otro rincón de Japón.
Aunque la decoración es prolija, las miradas de todos pronto nos ayudaron a encontrar a "los tres monos sabios": Mizaru (見猿), Kikazaru (聞か猿) y Iwazaru (言わ猿) ... no ver, no oír, no decir.
Mizaru, Kikazaru y Iwazaru
Panorámica de los almacenes
Linternas
Pagoda de Toshogu ... la tierra, el agua, el fuego, el viento y el cielo.
A continuación de la zona de los almacenes accedemos a la puerta de Yomeinon, probablemente una de las estructuras más ornamentadas de Japón. Franqueando la puerta llegamos hasta el edificio principal del templo.
Más allá del Torii, al final de la escalinata: la puerta de Yomeinon
Panorámica de la fastuosa puerta de Yomeinon
A la derecha del edificio del santuario se encuentre la puerta de Sakashitamon de donde nace una larga escalinata que conduce, montaña arriba, a través del bosque hasta el mausoleo de Tokugawa Ieyasu. Al final, el austero mausoleo parece poner un contrapunto abrupto a los excesos ornamentales que lo preceden. Pero no es así ...